Emma García
Me encanta correr y si es cerca de la playa de la Concha me vengo arriba
¿Qué te ataca más a los nervios: una mala audiencia o tener que ir a votar por tercera vez en un año y que encima sea el día de navidad?
Un mal dato te pone las pilas, te enseña, te motiva para hacerlo mejor y aprender de los errores. Unas terceras elecciones me crean impotencia. Estamos como en las primeras o peor.
En confianza y sabiendo que esto nunca lo va a leer doña maría teresa, ¿qué te parece el docu-reality ‘las campos’?
Maravilloso. Es un programa muy divertido en el que se abren en canal. Yo no podría, porque soy muy pudorosa, pero como espectadora estoy esperando nuevas entregas de “Las Campos”.
Llevas 8 años rodeada de adolescentes con las hormonas revolucionadas en ‘mujeres y hombres y viceversa’ (telecinco). ¿esto te está preparando para cuando a tu hija Uxue le llegue la edad del pavo?
(Risas) El máster en adolescentes lo tengo. Dentro de unos años, te diré si también lo tengo como madre de una adolescente (risas).
¿Emma García, como madre, es de las que se les escapa un ‘porque lo digo yo y punto?
No. No lo han hecho conmigo y yo tampoco lo hago con mi hija. Pienso que la autoridad y el respeto se ganan con argumentos y con hechos.
¿Estás en el grupo de whatsapp de las madres del cole? ¿o te libras porque eres famosa?
Estoy en el grupo de las madres, por supuesto y muy activa. Y famosa soy en el cole sí, pero como la madre de Uxue.
¿Después de tantos años trabajando y viviendo en madrid, eres más de chuletón o de callos a la madrileña?
Por favor, la duda ofende. ¡Chuleta, chuleta! que tengo buena dentadura.
¿Con qué receta presumes de ser una vasca con fundamento?
Con el pastel vasco. ¡En qué momento me enseñó mi ama! He quedado de bien tanto fuera como dentro de nuestra tierra.
Esto del running es una fiebre en Donosti. Como runner, ¿cuál es tu circuito favorito cuando vienes?
Me encanta correr, me despeja y me activa para enfrentarme a mis adolescentes y si puede ser cerca de la playa de La Concha ya me vengo arriba.
Estás estupenda, pero seguro que tu madre te sigue diciendo que estás muy delgada y que tienes que comer más.
Es muy graciosa. Siempre me lo dice, nada más verme. Luego se le pasa cuando ve que estoy fuerte y sana y que como bien, pero qué bienvenidas me da (risas).
¿Hay vida en Donosti más allá de los pintxos y del marco incomparable?
Vida hay claro, en muchos sitios pero ¡esa 31 de agosto!, esa calle no la he encontrado en ningún otro lugar que en Donosti.
No tienes perfil ni en facebook, ni en twitter ni en instagram. ¿Eres una outsider de las redes sociales?
Tengo, pero no son míos, son falsos. Hasta ahora he estado al margen pero para fin de año me animo, me conecto y me lanzo a la aventura de las redes sociales. Nunca es tarde si hay ganas.
¿Qué es lo mejor de estar en la cuarentena?
Lo práctica que te vuelves y la claridad con la que estableces el orden de prioridades. Estoy feliz a mis cuarenta y tres. Tengo más arrugas pero también mucho más humor.
¿Qué queda de la Emma que salió de Ordizia para estudiar periodismo?
Mucho, ¡si parece que fue ayer! Tengo menos rizos pero la misma pasión e intensidad a la hora de afrontar retos. Estoy muy viva.